¿Cómo elegir la mejor preparatoria para mi hijo?

Cuando se trata de elegir la educación de un hijo queremos que sea la mejor posible, que lo preparen como un profesional y como buen ser humano. Una de las decisiones importantes es el bachillerato, el último paso antes de entrar a la faceta donde estudiaran para el camino de su vida laboral. En la etapa de bachillerato también son adolescentes y nuestros hijos necesitan una escuela que los guíe a tomar las mejores decisiones.

Rasi, expresa: Cuando el niño ingresa a la escuela primaria y secundaria, ya ha vivido por varios años en un hogar, donde ha sido influido por los valores y prácticas de la familia. Sin embargo, los años de la escuela media superior y universitaria son aquellos en que irá haciendo suyos los valores que lo caracterizan como persona. Durante esa etapa de la vida, el joven continuará recibiendo la influencia de la familia y, si es religioso, también de la iglesia. Pero más allá de estos factores, la sociedad buscará amoldarlo a través de las amistades, la televisión, las lecturas y los modelos deportivos, artísticos o cinematográficos que decida imitar. Esto significa que, como educadores, tenemos apenas diez años para hacer un impacto perdurable sobre los valores que escogerán nuestros alumnos para el resto de su vida. Nuestra responsabilidad es emocionante y solemne. (citado en Sul- Americano da Educaçao Adventista, 2002, p.13)

En la actualidad las instituciones educativas han puesto un énfasis especial en preparar alumnos que puedan traducir los contenidos en competencias. La sociedad actual demanda profesionistas que puedan satisfacer las necesidades de los diversos campos laborales. Al elegir un modelo educativo la oferta se vuelve variada y múltiple, el padre y el educando tienen la disyuntiva de elegir la mejor, lo cual implica un gran desafío.

El Sistema Educativo Adventista (SEA) se han concentrado no solo en preparar hombres y mujeres aptos en lo académico, sino que también sean capaces de reconocerse como seres humanos con conciencia, capaces de adquirir valores que los guiarán durante toda su vida, contribuyendo en lo positivo o negativo en el desarrollo de la sociedad en la que viven, acorde a los principios y valores desarrollados durante su educación formal. Las instituciones educativas adventistas nunca han sido ajenas a la enseñanza de principios y valores en la formación integral del educando, por esta razón han establecido no solo la materia de valores, sino que, en cada una de sus asignaturas como un hilo conductor, han incorporado sistemáticamente la integración de la fe en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Educar es redimir, educar es preparar para el futuro, la educación adventista, como su nombre lo indica, busca formar individuos de acuerdo con la fe en la Biblia

La pregunta es sencilla, ¿es suficiente una educación que garantice un buen nivel académico? la respuesta es más profunda de lo que se cree y digna de un correcto análisis.

La educación es un proceso educativo en constante cambio, lo que demanda un análisis de su contenido de sus principios y valores. Frente a nuevas ideologías, influencias y prácticas de vida que impone la sociedad con el objetivo de amoldar a los jóvenes a una visión de vida .

¿Qué es la educación adventista y por qué es importante?...

...Y porque es una excelente opción al momento de tomar una lección educativa para su hijo e hija, Elena White expresa: “A fin de comprender qué abarca la obra de la educación, necesitamos considerar… La naturaleza del hombre y el propósito de Dios al crearlo… El cambió que sufrió la humanidad cuando se introdujo el mal…. Y el plan de Dios para cumplir, a pesar de todo, su propósito”

La verdadera educación significa más que la prosecución de un determinado curso de estudio. Significa más que una preparación para la vida actual”. El concepto divino de educación no concluye cuando el alumno termine un currículo de materias para pasar al siguiente grado o concluya una carrera. La educación que Dios tiene planeada para nosotros no se limita a que tener una profesión u oficio para solventar los gastos de la vida. La educación adventista mira más allá de este mundo. En realidad, “abarca todo el ser y toda la vida del ser humano”.

Algunas sugerencias al momento de elegir una educación de nivel medio y medio superior:

1. Preparación Integral, que no solo se enfoque en el desarrollo profesional del alumno sino en contribuir en su desarrollo humano con base en valores y principios elevados.

2. Calidad educativa, docentes que tengan una amplia experiencia y cubran el perfil docente requerido para cada área de estudio impartida.

3. Respaldo, incorporación y acreditación ante la autoridad correspondiente

4. Conoce las instalaciones, los planes de estudio y aclara cualquier duda.

5. Compara costo beneficio.

6. No menos importante la distancia de traslado y horarios de clase.

Permíteme finalmente, recomendarte nuestras instituciones educativas, puedes concertar una cita y conocer la oferta educativa que tenemos muy probablemente somos la opción que estás buscando para la educación de tus hijos: https://www.facebook.com/SEAUMC

Bibliografía

• Congresso Sul- Americano da Educaçao Adventista (2000). Escola, Sociedade e Valores no

• Século XXI. Sao Paulo: Instituto Adventista de Ensino.
  David Hernández Vanegas, Una educación más amplia y elevada. Educación adventista (2019)